Un agente de la ‘Kitchen’: «Se nos avisó de que otro equipo entraría en el taller de Rosalía y en el domicilio de Bárcenas»

OKDIARIO ha localizado a un agente de la operación Kitchen. Se trata de uno de los policías que formó parte del operativo destinado a seguir a Luis Bárcenas con el objetivo de localizar y destruir ilegalmente las pruebas del caso Gürtel que pudiera tener en su poder el que fuera tesorero del PP en época de Mariano Rajoy. Este diario ha entrevistado al agente, que señala que las órdenes se las daban en nombre de Mariano Rajoy y Soraya Sáenz de Santamaría y que les dieron el aviso de que un segundo “equipo de la Kitchen entraría en el taller de Rosalía Iglesias y en el domicilio de Bárcenas”.

El agente contesta a OKDIARIO sin rodeos que tuvieron conocimiento de las entradas en el taller de Rosalía Iglesias -la mujer de Luis Bárcenas- y el domicilio familiar. “Se nos dijo que se iba a hacer una entrada en su domicilio”. La causa no era otra que el hecho de que el primer registro, el del taller, no había dado el resultado deseado: detectar lo que denominaban como el “material comprometido”. En concreto, tres pendrives. Por eso, decidieron mandar al conocido ya como falso cura para buscar ese material en el domicilio familiar de los Bárcenas.

Pero todos esos trabajos de entrada en inmuebles fueron desarrolladas por otros equipos. Lo que implica que la Kitchen contó con varias unidades de seguimiento o espionaje.

La labor de la unidad en la que se encontraba el agente entrevistado por OKDIARIO fue la de dar “seguridad”: “Vigilar el entorno, estar en la calle, y si veíamos algo que no fuese normal, avisar”. El propio entrevistado no oculta su sorpresa ante lo que les dijeron con respecto al profesional que iba a desarrollar la labor de entrar en el domicilio familiar: “Nos dijeron que se había contratado a una persona muy, muy competente, que iba a ser el que entraría en el domicilio”.

El agente añade que el «muy competente», era «el falso cura». «Se nos dijo que era una persona muy competente, que lo habían contratado con ese fin y que iba a ser la persona que entrara. Todo ello nos lo seguía comunicando García Castaño, El Gordo».

Lo cierto es que, tal y como publicó en su momento OKDIARIO, el Ministerio de Interior prometió 50.000 euros de los fondos reservados al falso cura, un delincuente con múltiples antecedentes policiales, Enrique Olivares, para que asaltara la casa de Luis Bárcenas disfrazado de sacerdote y secuestrara a su familia, con el fin de intentar recuperar tres pendrives con documentación comprometedora sobre la financiación irregular del PP.

Durante años, este delincuente logró burlar a la Justicia ocultándose tras la identidad que en realidad correspondía a otras dos personas. Ambas sufrieron durante años las consecuencias de los delitos que cometía Enrique Olivares.

Todo ello, después de que el falso cura accediera a la vivienda de Bárcenas la tarde del 23 de octubre de 2013, sacara de un maletín un viejo revolver de bolsillo con un tambor de cinco balas modificado de manera rudimentaria;  maniató con unas bridas en las muñecas a Rosalía Iglesias, su hijo Guillermo y la asistenta; y después exigió a los secuestrados “la información que tienen para derribar a este Gobierno y su presidente”.